Siempre en todos lados existía esa expectativa de ver llegar a la primer barra, en el Universitario de Tigres a pesar de ir perdiendo la gente no cayó en aquel primer viaje a la sultana del norte, los medios locales sorprendidos dieron crédito de el apoyo absoluto de una hinchada visitante por primera vez en esa ciudad y a más de 13 horas de distancia de Pachuca.
Fue la primera en cánticos, mantas, lienzos, y la primera en apoyar de manera espectacular en el país, en realidad a sus inicios no fue vista con muy buenos ojos por la demás afición en México pero ahora ya casi en todos los estadios existen barritas o imitaciones.
Sin embargo, muchas barras quisieron ser una imitación mala de las barras sudamericanas generando violencia en los estadios, y si bien es cierto que la Barra Ultra Tuza apoya al estilo de los del sur del continente también es cierto que la Ultra no genera violencia y es respetuosa de la afición. La Barra Ultra Tuza alienta al equipo Tuzo sin desear algo mas que ver al equipo de sus amores salir campeón. Nada más gratificante que ver reconocido el esfuerzo, a la pasión y al apoyo a un equipo, no importando, la distancia, el lugar o el clima, la barra siempre es fiel a los colores del equipo representativo de 'la Cuna del Fútbol Mexicano'
Sin agredir, cantando durante los 90 minutos de cada partido, sin importar el resultado, como se debe alentar, motivando a los jugadores para hacer aún más grande a un equipo que con mucho esfuerzo se ha convertido en protagonista del fútbol azteca.
Pero los hinchas hidalguenses no solo se preocupan por alentar al equipo, también cumplen con una labor social vendiendo boletos en el Estadio Hidalgo los días de partido de local y con lo recaudado brindan ayuda a organizaciones necesitadas, entregándoles junto con jugadores del Pachuca lo que hayan requerido.
La Barra Ultra Tuza ha sido vital en la obtención del ascenso en el 98, en la permanencia lograda en el 99, el titulo del mismo año y los conseguidos en el 2001 y 2003. La banda ha callado a hinchadas locales de varias ciudades del País y la principal característica de esta gente es alentar sin parar todo el partido sea el marcador que sea y aun mas allá cuando otros callan.
En el apertura 2003 algunos integrantes formaron la barra independiente que denominaron "Banda del Huracán" tras algunas diferencias en la organización y estructura, esta hinchada cobró nuevos ritmos y cantos además de tener a gente de edad media facilitándole la fiesta total en las gradas.
Para el 2004 la Ultra Tuza y la Banda del Huracán deciden reconstituirse y personajes como Tomás y "el Puchas" tomaron el mando junto con Enrique Muñoz y un puñado de entusiastas que decidieron perfeccionar a la banda.
Hoy en día la Barra Ultra Tuza - La Banda del Huracán - ha crecido en numero e intensidad doblegando a hinchadas de otras ciudades y es el gran apoyo del equipo aún cuando las entradas en el estadio Hidalgo no son las esperadas, La Ultra Tuza siempre está y busca ser cada vez más grande en todos los aspectos.
La Barra Ultra Tuza - Historia
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